viernes, 16 de diciembre de 2011

Rusia abre la puerta de las sanciones a Siria

Moscú condena en un borrador la violencia del régimen de Bashar al Asad

Nueve meses ha tenido que esperar Naciones Unidas para que Rusia decidiera condenar públicamente la violencia en Siria. Tras varias intentonas de establecer sanciones al régimen de Bashar al Asad, siempre vetadas por Moscú y China, los rusos han decidido dar un paso adelante en la resolución del conflicto. Ayer, durante una reunión de consultas sobre Oriente Próximo, Rusia presentó un borrador en el que insta al Gobierno alauí a impulsar reformas y pide terminar con la violencia a los dos bandos partícipes en el conflicto. La ambigüedad de esta declaración abre la puerta al establecimiento de posibles sanciones contra Siria porque, si bien no se expresa directamente, Moscú incluye al Ejecutivo sirio en la condena. Según publica la agencia Dpa, China suscribiría esta misma opinión. 

El embajador ruso, Vitaly Churkin, declaró tras la presentación del borrador que ya es hora de que el Consejo de Seguridad actúe en el conflicto sirio. Considera que es “urgente” detener la violencia, proteger los derechos humanos en el país árabe y agilizar las reformas. Churkin también puntualizó que el papel de la ONU no debe ser “el de exacerbar el conflicto, sino el de relajarlo”. 

Estas declaraciones han sido recibidas con frialdad por los demás miembros del Consejo de Seguridad. El representante británico considera que el texto difundido por Rusia no refleja la gravedad de la situación. Por su parte, la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, entiende que el borrador pone en el mismo plano las barbaries de Gobierno y oposición, aunque a pesar de ello, cree que no hay que dejar pasar esta oportunidad que brinda Rusia. De la misma opinión es Francia, aunque su punto de vista es mucho más optimista. El embajador galo, Gérard Araud, ha calificado esta noticia como un “evento extraordinario” porque indica que, por fin, Rusia no ejercerá su derecho a veto de cara a posibles sanciones, como ocurrió el pasado mes de octubre. 

Las acciones violentas en Siria han dejado ya más de 5000 muertos, entre ellos 300 menores, según cifras de Naciones Unidas. Solo ayer, 27 miembros del Ejército y de las fuerzas de seguridad sirias fallecieron a manos de desertores en la provincia de Deraa, según informa la agencia Efe. La declaración de Moscú no es vinculante en ningún aspecto, pero es un importante paso al frente de cara a una posible intervención por parte de la ONU para sumarse a los países y organizaciones que han impuesto ya medidas punitivas contra el régimen de Bashar al Asad.